Una de las opciones que usamos para tratar las várices es un tratamiento basado en láser llamado ablación endovenosa con láser o EVLA, por sus siglas en inglés. Este procedimiento sella las venas con problemas para que la sangre se desvíe por una vía en mejor estado.
¿Qué es la ablación endovenosa con láser?
La EVLA utiliza fibra óptica y tecnología láser. Usando el ultrasonido como guía, el médico de venas inserta una fibra diminuta en la vena en mal estado y luego usa un pequeño rayo láser para calentar el área a tratar hasta que la válvula y la vena se cierran. El procedimiento es mínimamente invasivo y ayudará a que las venas de las piernas propulsen un flujo sanguíneo más saludable de inmediato.
QUÉ AFECCIONES TRATA LA ABLACIÓN ENDOVENOSA CON LÁSER
El seguro cubre la EVLA porque este tratamiento de venas se realiza para abordar los síntomas médicos relacionados con la causa subyacente de la enfermedad venosa, conocida como insuficiencia venosa crónica. Los tratamientos de venas varicosas, como EVLA, abordan síntomas como calambres en las piernas, picazón y hormigueo, e hinchazón de las piernas. En Metro Vein Centers, aceptamos más de 200 planes de seguro y trabajamos directamente con su proveedor de seguros para maximizar su cobertura, sin ningún papeleo o molestia para usted.
La EVLA utiliza fibra óptica y tecnología láser guiada por ultrasonido para cerrar o sellar las válvulas de las venas afectadas. Mientras usted está bajo anestesia local se inserta una fibra diminuta a través de la vena afectada y se utiliza un rayo láser para calentar y cerrar o sellar las venas afectadas.
La ablación endovenosa con láser es un procedimiento mínimamente invasivo que se realiza en nuestros consultorios. El tratamiento usa anestesia local y toma solo 30 minutos. Podrá salir caminando del consultorio y conducir a su casa.
Por lo general, los pacientes pueden volver a sus trabajos dentro de las siguientes 24 horas, y experimentan muy poco dolor o efectos secundarios. Después de su tratamiento, le recomendamos que regrese dentro de una semana para evaluar los resultados mediante una revisión rápida con ultrasonido.
Primero, adormeceremos el área del tratamiento con anestesia local.
Luego, usando un rayo láser guiado por ultrasonido, introduciremos una pequeña fibra óptica en la vena afectada.
El médico de venas usará un micro rayo láser dirigido por ultrasonido para calentar y cerrar la vena afectada.
Una vez sellada, la vena desechada se reabsorberá en su cuerpo a medida que su sangre circule por vías más saludables.
Le daremos medias de compresión para que las use durante su rápida recuperación y programaremos una cita de seguimiento.
Por lo general, los pacientes solo experimentan alguna sensibilidad alrededor del sitio de tratamiento, posibles hematomas y/o una sensación de tensión en las piernas. Esto generalmente desaparece dentro de las 24 a 72 horas posteriores a su tratamiento con EVLA.
La ablación endovenosa con láser es una excelente opción para pacientes con venas grandes que funcionan mal. Debido a la inserción de la fibra, la EVLA funciona mejor para aliviar el dolor en las piernas de pacientes con venas rectas, relativamente no torcidas. Durante su consulta inicial, nuestros médicos certificados y especialistas en venas determinarán el mejor curso de acción para las necesidades específicas de salud de sus venas.
